Carlota Alonso
Existe algo hipnótico, evocador y casi terapéutico cuando un músico desnuda su alma en un estudio de grabación. Existe también algo trascendental en esa vulnerabilidad del que trata de sacar lo mejor de sí mismo. Contiene algo así como un ritual casi mágico y magnético que embellece la percepción. El músico se abre en mundos paralelos ante la omnipresente sencillez de lo complicado. Durante su solemne concentración durante la grabación, hace vibrar el aire y corta respiraciones…
Existen privilegiados y sufridores en lo que al mundo musical se refiere…Personas que han dedicado su vida, su tiempo y su esfuerzo en sacar adelante sus ideas, sus proyectos, sus retos y pasiones. En definitiva, personas que han encontrado en la música su inspiración pero también su aspiración. Este es el caso de Francisco de Rivera. Comenzó en esto del universo musical hace escasos diez años, más como una afición que como una opción laboral. Sin embargo, pronto encontró diversas propuestas como músico que no quiso desaprovechar. De la mano de Pedro Andrea, amigo y guitarrista, conoció diferentes personas de la industria. Trabajó en las giras de diferentes artistas de renombre como Miguel Bosé o Luz Casal pero encontró también refugio en trabajos como guitarrista de sesión y como productor. Asimismo, alrededor de 2001 decidió apostar por el que es su estudio de grabación: Idemm, un lugar en el que poder desarrollar también su pasión por la música.
En ISP Música continuamos con nuestro recorrido por los estudios de grabación más punteros…Bienvenidos a las madrileñas entrañas de Idemm, bienvenidos a una catarsis musical.
¿Cómo y cuándo surgió la iniciativa de montar el estudio de grabación Idemm? Hace ahora unos diez años, acababa de salir de la universidad con un par de cosas importantes bajo el brazo: una diplomatura a la que no quería dedicarme y la importante decisión a tomar respecto de qué hacer para “ganarme la vida”. Mis titulaciones decían una cosa, pero yo sólo tenía claro que me gustaba la música. Eso era lo que había estudiado más años sólo por el placer de hacerlo, así que aunque no sabía cómo, lo sacaría adelante. Al final decidí hacer un proyecto en el que se aunaban una escuela de música moderna, sonido y un estudio de grabación y lo llamé Instituto de Estudios Musicales y Musicotecnológicos, cuyo acrónimo era Idemm. Con el tiempo y por diversas circunstancias la escuela fue perdiendo importancia en mis planes y el estudio fue creciendo hasta convertirse en lo que es en la actualidad.
¿Cuáles son los equipos, instalaciones, salas o dotaciones que forman parte del estudio?, ¿Cómo está estructurado?A groso modo, el estudio está situado en un edificio de tres plantas. La primera y principal, de unos 250 m2 consta de una sala de control de unos 50 m2 y cuatro salas de grabación de diferentes tamaños y acústicas. El control citado tiene claraboyas en el techo que proporcionan luz natural, tanto a su superficie como a las salas 1 (35 m2) y 2 (20 m2), que son las principales. He procurado crear un entorno cómodo y agradable, considerando que la luz natural es importante en ese sentido. En el resto de la planta están: la sala 3, muy amplia (65 m2); la 4 (25 m2), que utilizamos casi exclusivamente para los momentos de calentamiento y ensayo de músicos en procesos previos a grabaciones y un espacio de descanso, para que los músicos y resto de personas implicadas en la producción.
Como equipos más destacables están la consola principal, una Neve V1 de 48 canales adquirida hace un año de la que nos hemos enamorado los que aquí trabajamos (el durísimo esfuerzo para ponerla a punto y adaptar el estudio, está mereciendo la pena), una buena lista de canales periféricos de distintas marcas: Solid State Logic, API, Summit, Avalon, Focusrite, Fatso…Y otra de micros: Neumann, Sennheiser, Beyerdynamic, Audiotechnica, Shure, Haifeng, AKG…Además, nuestras opciones de escucha son:
Nuestras opciones de escucha son: Dyn Audio Acoustics BM15 Air System 5.1. A/D, Genelec 1031 A, Genelec 7080, PMC ab1. Mientras, la consola digital de apoyo es una Control 24 de Digidesign. Cabe destacar también que disponemos de un piano de cola Yamaha G5 situado en la sala 1.
¿Con qué artistas has trabajado en el estudio Idemm en el pasado?, ¿y actualmente, con qué tipo de artistas estás trabajando?En casi una década, he tenido la fortuna de ver pasar por el estudio a mucha gente y gracias a todos he aprendido infinidad de cosas, precisamente porque cada uno era diferente. Quiero decir con esto que no hemos trabajado con un perfil determinado de artista, aunque sí es cierto que la mayor parte de las producciones que se han realizado en Idemm han sido de pop y rock. Algunos de los artistas que han grabado o mezclado sus trabajos aquí son: Miguel Bosé, Ana Torroja, Antonio Vega, David Bustamante, Despistaos, Marta Sánchez, Lolita, Melocos, Pastora Soler…
Por supuesto, guardo con especial cariño las sesiones de los amigos, entre los que siempre destaco a Pedro Andrea, excepcional guitarrista y compositor y Carlos Izaga, otro gran autor y cantante. Actualmente, estamos trabajando más con producciones autofinanciadas que con proyectos provenientes de compañías, pero no hay muchas más diferencias. Ahora mismo comenzamos con la mezcla del musical de Sabina “Más de Cien Mentiras”.
¿Cuál es la filosofía de trabajo del estudio?Nuestra filosofía de trabajo es la de poner todos nuestros medios, tanto humanos como materiales, al servicio de la comodidad creativa e interpretativa de cada músico o artista. Tratamos de hacer todo este proceso lo más sencillo posible para los que vienen aquí a sacar adelante algo tan importante y delicado, como lo es la grabación de una canción. Para ello es necesario saber que en el momento en que comienza una sesión, lo más importante son las personas que están grabando o las pistas que han de mezclarse. No hay lugar para los egos propios. Cada palabra, cada gesto o cada idea tienen que servir para ayudar a crecer al intérprete y su trabajo…Todas las demás actitudes sobran. En este sentido, debo agradecer el haber conocido a Javier Abril, un ingeniero de sonido encomiable por su trabajo técnico y con una forma de ser excepcional, capaz de hacer de la sesión más ardua un rato distendido y provechoso.
¿Aplicáis algún tipo de ‘psicología’ con el músico?, ¿Cómo se saca lo mejor que el músico lleva dentro?Como músico y productor, he podido estar en los dos lados de la mesa de mezclas y sé por experiencia propia y por la compartida a lo largo de los años con amigos y colegas de profesión, que cada vez que se entra a grabar, uno se muestra en mayor o menor medida “desnudo” ante los que están presenciándolo. Digamos que en el momento en que se pulsa “Rec” te vuelves más vulnerable y un gesto inapropiado, alguna palabra de más, puede cambiar diametralmente el rumbo de una sesión y con ello el resultado final de un trabajo.
El estado de ánimo de la persona que va a realizar una grabación es para nosotros un factor esencial, de manera que siempre tratamos de hacer ver que estamos ahí para ayudar y facilitar cualquier cosa que ayude a la distensión y comodidad…Lo que creo es que si la persona está bien, sacará lo mejor de sí misma.
¿Cómo ha afectado la crisis al estudio?Lo cierto es que, aunque me considero afortunado por seguir pudiendo realizar trabajos con regularidad, mentiría si dijese que las cosas no han cambiado mucho en los últimos años. Las discográficas ya casi no financian proyectos y si lo hacen, no invierten tanto dinero. Además, con el tiempo y la recesión económica, las circunstancias desesperadas de muchos profesionales del sector han hecho que actualmente transijamos con condiciones antes inaceptables.
En definitiva, la situación podría resumirse en que ahora, la mayoría de las producciones son autofinanciadas y cada vez se realizan con menos medios. Así que son tiempos en que hay que ser muy flexible, polivalente y tener verdadera vocación para continuar en la música… Probablemente los que permanezcamos aquí a partir de ahora seremos aquellos que verdaderamente deseamos hacerlo.
¿Cuál es tu valoración del mercado musical en la actualidad?Creo que estamos viviendo la desaparición de un modelo de industria que tendrá que ser sustituido por otro que aún no existe. Lo bueno es que asistimos a la destrucción de una forma de producción obsoleta y bastante viciada en que las discográficas no arriesgan su capital en nuevos proyectos y prefieren sacar partido a un catálogo bastante manido; a proyectos televisivos de dudosa calidad artística; al beneficio editorial por vías ajenas a la música en escenarios y la explotación de trabajos discográficos; Un sistema en que las emisoras de radio han preferido dejar de apoyar a los artistas para estar al servicio exclusivo de los índices de audiencia…En definitiva, el panorama actual nos muestra una curiosa mezcla entre la saturación con “más de lo mismo” y un maravilloso campo de cultivo de nuevas ideas que con el tiempo saldrán a la luz. Y es precisamente a estas últimas a las que todos deberíamos ir prestando atención.
¿Os apoyáis en internet en algún momento del proceso de grabación y masterización?Internet es una herramienta muy útil para poder compartir archivos y facilita enormemente el trabajo a distancia cuando es necesario. Gracias a él pueden realizarse escuchas de pruebas de mezcla o máster sin necesidad de venir al estudio. Aunque, salvo en casos excepcionales, las escuchas más importantes las realizamos in situ, así los retoques se realizan de un modo más eficiente, ya que la comunicación directa con el ingeniero en estos casos es difícilmente sustituible.
¿Qué tipo de innovaciones aporta el estudio de grabación Idemm?, ¿Qué es lo que hace diferente a Idemm de otros estudios de grabación?Creo que lo que hace diferente a Idemm de otros estudios, aparte de todos los matices que hacen de cada uno lugares únicos, son sus salas. Es decir, la capacidad para poder albergar grabaciones en directo con tomas microfónicas aisladas, que facilitan enormemente los procesos de edición y posterior mezcla. Esta peculiaridad permite dos cosas: poder ahorrar tiempo de recording y con ello presupuesto, y a la vez, conservar el espíritu de la interpretación simultánea en “directo”, donde las cosas salen de un modo más natural, más humano. Así que para mí, la gran innovación que hemos hecho es precisamente la de poder volver a hacer las cosas como antes.
Hay momentos en que la música nos acompaña en nuestros estados de ánimo más íntimos, existen lugares que tienen música y música que evoca lugares (como es el caso de Idemm)…Puede que sea abstracto el sentimiento que la música nos transmite, sin embargo, uno mismo va creando poco a poco la que es la banda sonora de su propia vida. También existen melodías que nos encogen el corazón, partituras cuyas notas vuelan por nuestra mente, por nuestro mundo…Al fin y al cabo, música que se convierte en parte de lo que nosotros somos…Música somos y en música nos convertiremos.